Durante la jornada, diferentes sectores manifiestan su tristeza, cariño y respeto al profesional de fundamental labor en el sistema de salud local.

Durante el fin de semana, Julio Pereyra expresa su reconocimiento hacia el prestigioso traumatólogo. “Significa una pérdida fundamental para la comunidad. Particularmente, lo apreciaba mucho”, confiesa.

En las redes sociales, el Jefe Comunal afirma: “Fuiste una persona muy querida por todos los vecinos. Tu entrega, trabajo y compromiso con la salud de los varelenses van a estar por siempre en nuestro recuerdo”.

Sus pacientes resaltan el profesionalismo, hombría de bien y solidaridad con los más vulnerables a través de sus perfiles virtuales.

“Muchos aprendimos por su intermedio sobre las capacidades diferentes, allá por los ´90, cuando todavía se hablaba de incapacidad. Lo vamos a extrañar”, revela emotivo el secretario de Ambiente municipal, Mario Kanashiro, en Facebook tras concurrir a la despedida.

Thill protagoniza un incidente con su vehículo en el partido de San Vicente y lo trasladan hacia un sanatorio local. Posteriormente, deciden su derivación al Hospital Italiano. Fallece tras varios días de agonía.

El incesante cortejo en la casa de sepelios exhibe el cariño hacia el prestigioso profesional graduado en la Facultad de Ciencias Médicas, perteneciente a la Universidad Nacional de La Plata, en diciembre de 1987. 

Funcionarios municipales, del gobierno provincial con responsabilidades en el distrito, profesionales de la salud, representantes de entidades intermedias y vecinos en general visitan la casa de sepelios de la ciudad capital provincial durante el fin de semana. La sala recibe ofrendas florales desde la Intendencia, hospitales, clínicas y colegas allegados.

“Estaban sumó una propuesta de rehabilitación basada en la comunidad cuando comenzó a trabajar en la comuna. Logró visibilizar una problemática como la discapacidad en el sistema sanitario. Era una persona con mucha iniciativa. Trascendió el ámbito médico, es decir, rompió los límites del consultorio. Fue un pionero”, describe Mario Rodríguez, secretario de Salud municipal.

Thill trabaja en el municipio durante once años ininterrumpidos. En 1998, obtiene la designación como Director de Discapacidad en la Secretaría de Desarrollo Social. Ocupa el mencionado cargo hasta diciembre del año 2002.

Los trabajadores del Hospital “Mi Pueblo” reconocen la capacidad para “imprimir su impronta en el sistema de salud”  y despiden a “un gran compañero y amigo” con un texto de Eduardo Galeano: “Los fueguitos”, publicado en el “Libro de los abrazos”.

En tanto, su centro de atención de la calle Florida, en Villa Vatteone, permanece cerrado por duelo durante toda la semana.