Dicha iniciativa surgió al vislumbrar que intervenciones de emergencias sostenidas en el tiempo, van generando en los profesionales que realizan dichos trabajos, diversas consecuencias. Se comenzó a observar que aquellos que debían atender situaciones críticas,  de contención y socorro, comenzaban a manifestar reacciones muy similares a las de las personas afectadas primariamente.

En este contexto, ya no eran sólo víctimas quienes habían vivido una situación crítica, resultando heridas,  habiendo perdido su casa, a un familiar muy cercano, sus bienes, o su trabajo, sino también quienes se ocupaban de ellos.

Así, personal de rescate y los agentes de alta exposición son considerados víctimas de tercer nivel.  Están expuestos a sufrir distintos accidentes, ya sea por los riesgos que deben correr en diferentes situaciones de socorro, o con victimas agresivas, y también por el impacto emocional constante que los afecta, los enfrenta a las pérdidas, al dolor, al enojo, la rabia, la impotencia, la tristeza, la muerte. No hay equipo, uniforme, guardapolvo ni casco que los proteja de esto.

Por eso, se desarrolla la capacitación “Herramientas para la atención emocional en Crisis – P.A.E (Primeros Auxilios Emocionales), una iniciativa que busca que los efectivos se concienticen sobre esta problemática, y a partir de ello, puedan implementar los correspondientes dispositivos, tendientes a resguardarse física y emocionalmente, desde la prevención y la atención.